El presente de nuestro equipo no es el óptimo, es difícil entender el bajo rendimiento y los malos resultados que se están cosechando. Pero una de las cosas que más sorprende, es las pocas opciones de gol que se generan. En fin, es una mala racha que con trabajo y mucho sacrificio se puede salir.
En la tarde de ayer, el equipo de Rojas-Bravo volvió a decepcionar y cayó derrotado claramente por 2 a 1 ante el buen equipo de Atlético Madrid. Si bien en un momento se estuvo cerca de dar vuelta el partido, nunca se pudo predominar en el juego. Nuevamente evidenció la falta de peso en la ofensiva y los serios problemas en el mediocampo, cosas que en el torneo pasado jamás ocurrió.
Es cierto que se llevan disputadas tan solo tres fechas de este campeonato, y que una buena racha ganadora se puede volver a la pelea, pero la realidad es distinta, sumado a las bajas por lesión.
Cómo habrá sido el partido, que la semilla prácticamente no pateó al arco en todo el partido, sólo inquieto con pelotas paradas, tal así que de ese medio llego el empate del ingresado en el complemento Federico Calatayu. Mientras que el número ocho había puesto en ventaja a los 20’ luego de una falta clarísima a ticha Herrera que el juez no vio, o no quiso ver.
Sin chispa, sin cambio de ritmo, lento de reacción para ganar en las divididas, la semilla se iba al entretiempo con una imagen nunca vista. Tan opaca fue la expresión futbolística semillera, que Bravo estaba a punto del descontrol.
Para el complemento los dirigidos por la dupla salieron con otra actitud, pero como vino sucediendo en estas tres fechas, “con escaso fútbol”. Mana intento darle mas peso ofensivo poniendo a Gerez en cancha, pero esto sólo fue una teoría sin intérpretes que la lleven adelante, sometida al imperio que imponían los coyotes, que mostraron ser más prácticos y mas inteligentes a la hora de jugar. Y cuando los resultados no acompañan la desesperación te lleva a la locura y a buscar el arco contrario sin proteger el propio.
Y así fue que llego el segundo gol visitante, un nuevo error en la mitad de la cancha con todo el equipo saliendo, le permitió a “zurro” quedar mano a mano con Pablito Rojas. El delantero lo eludió sin problemas y la empujo sobre la línea para poner el 2-1.
Desde ahí el partido se convirtió en un “punta y hacha terrible”, con los dos equipos dejando la piel en la cancha. SI bien la semilla intentaba llegar al empate “como sea”, los coyotes eran mas simples y tal así que crearon dos o tres situaciones clarísimas para rematar el match. Los minutos finales fueron de desesperación en busca de la igualdad, igualdad que nunca llegaría. Final del partido y desilusión semillera.
Por último, no hay que dejar pasar por alto un detalle que no es para nada menor, ya que los arbitrajes nos están perjudicado bastante, pero no es excusa. Lo cierto es que la semillería no encuentra el rumbo. Pero al equipo estas situaciones los motivan más. “Las adversidades nos agrandan…”
Síntesis del Partido:
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